La protesta ha sido convocada a través de la página de Facebook del grupo, en la que se denuncia que la visita papal costará a las arcas públicas unos 82 millones de dólares. Hasta la tarde de este miércoles más de 3.600 personas habían confirmado su asistencia a la convocatoria, lo que no significa necesariamente que todos ellos acudan a la manifestación.
Los preparativos de la visita del papa Francisco han estado marcados por la polémica. Por ejemplo, esta semana el vicealcalde de la ciudad de Niteroi, Axel Grael, tachó de "acto criminal" la tala de más de 300 árboles centenarios en un parque nacional para que los peregrinos puedan celebrar una misa durante la visita del pontífice.
El mes pasado Brasil fue escenario de multitudinarias protestas por el elevado desembolso público en la organización de eventos deportivos como la Copa del Mundial de fútbol de 2014, pero los organizadores desvincularon estos actos con la organización de la visita del papa del 22 al 28 de julio con motivo de las Jornadas Mundiales de la Juventud.
Francisco dijo que no teme que esas protestas en Brasil perturben su visita. Por su parte, Dilma Rousseff se había comprometido a garantizar la seguridad del sumo pontífice durante su visita.