Los agentes municipales habían desplegado un operativo al que se sumaron bomberos que inflaron una colchoneta bajo el puente, sobre el que pasa una autopista, como último recurso para evitar un fatal desenlace.
Le ofrecí darle un abrazo recordándole que aún le quedaban por hacer muchas cosas en la vidaSin embargo, Mikel era consciente de que las medidas tomadas por la Policía podrían no salvar la vida al desesperado hombre en caso de caer al vacío. Por esta razón decidió acercarse para tranquilizarle con palabras de aliento: "Le ofrecí darle un abrazo recordándole que aún le quedaban por hacer muchas cosas en la vida".
El agente intentó convencer al sexagenario para que desistiera de su propósito por espacio de 45 minutos y en un descuido del suicida, se abalanzó sobre él y con la ayuda de un bombero, tomaron el control de la situación.
Después de lo ocurrido, Mikel abrazó al suicida y le ofreció su amistad. Posteriormente el héroe de esta historia reconocería que aquél fue el día más complicado en sus 12 años de carrera profesional.