"Los recientes informes sugieren que algunos adaptadores de usurpación de marca y de terceros no están diseñados adecuadamente y podrían dar lugar a problemas de seguridad", indicó Apple en un comunicado.
A mediados del pasado mes de julio, una joven china murió electrocutada al contestar una llamada mientras su iPhone estaba cargando. Según medios locales, la muerte se debió al mal funcionamiento de un adaptador pirata.
A los pocos días de ese incidente, salía a la luz que otro joven de la misma nacionalidad entró en coma varios días tras tocar el móvil mientras tenía el terminal conectado al enchufe, nuevamente con un cargador que no pertenecía a Apple.
Inicialmente el gigante informático publicó en su portal información detallada que permitía a los clientes identificar un cargador pirata con la finalidad de no tener que lamentar más incidentes.
Sin embargo, ahora la compañía ha decidido que a partir del próximo 16 de agosto las personas con un cargador no oficial puedan cambiarlo por uno original por 10 dólares, o el equivalente a este precio en el país.