Las empresas están ganando millones de dólares, vendiendo este producto aún más caro que el gas
Para atraer a más y más consumidores las grandes compañías recurren a publicidad en la que participan famosos que hacen más atractivo su producto para el consumo. "Las personas son como los niños. Al ver un diseño publicitario, quieren tenerlo porque ven a una persona guapa en el río o bajando de la montaña", comenta Irena Salina, la directora de 'Flow, por amor al agua'. "Todos somos tontos, básicamente", añade.
Algunos expertos sostienen que es un error muy común pensar que el agua embotellada es más pura y segura que el agua del grifo. Mae Wu, del Consejo para la Defensa de Recursos Naturales (NRDC), explica que "las empresas están ganando millones de dólares vendiendo este producto aún más caro que el gas". A su juicio, lo que están haciendo es "beneficiarse de la gente que piensa que el agua del grifo no es tan buena como el agua de la botella".
En esta misma línea se expresó Erian Díaz, subrayando que en los últimos años la industria del agua embotellada ha intentado convencernos de que el único lugar para conseguir agua limpia y segura está en la botella. "La industria privada del agua está impulsando con mucha agresividad una agenda radical para poner agua pública, que es un derecho humano, en manos privadas con fines de lucro", enfatizó.
Por si fuera poco con estafar a los consumidores, las corporaciones causan mucho daño ambiental malgastando los recursos naturales. Según Emily Wurth, de la ONG 'Food and Water Watch', las industrias de agua embotellada usan anualmente entre 32 y 54 millones de barriles de petróleo, lo que equivale a la gasolina de 1 ó 2 millones de coches.
¿Qué daños puede causar la agua embotellada?, a solo un 'clic'.