De acuerdo con el mencionado periódico francés, el domingo por la mañana dos agentes de Policía detuvieron un coche que circulaba de forma errática y constataron que el conductor estaba en estado de embriaguez.
Según un representante del sindicato de la Policía local, Unité SGP, tras la petición de los agentes de que se sometiera a la prueba de alcoholemia, el conductor perdió el control, oponiendo resistencia a las fuerzas de seguridad, mientras que una pasajera del coche supuestamente comenzó a morder a uno de los oficiales.
El video comienza en el momento posterior, con una escena en que un oficial intenta someter al conductor a la prueba manteniéndolo en el suelo, mientras que el segundo agente se enfrenta a una de las pasajeras, golpeándola con su porra, incluso una vez con fuerza y en la cara. Unos momentos más tarde, el mismo funcionario se dirige a su vehículo para sacar un aerosol de gases lacrimógenos, según el diario francés 'Le Parisien', y después rocía con él directamente la cara de la mujer, antes de pulverizar también a una tercera pasajera.
El ministro francés del Interior, Manuel Valls, confirmó el martes que la Inspección General de la Policía Nacional había sido informada de los acontecimientos que se muestran en el video y ya ha iniciado una investigación.
Además, Valls advirtió: "No hay lugar en la Policía para la violencia o para el que no tienen ningún respeto por los ideales de la fuerza de seguridad republicana."
El video ha provocado gran indignación entre gran parte de la ciudadanía francesa que condena las acciones de los agentes de Policía que aparecen en la grabación considerándolas una "vergüenza para toda la Policía de Francia".