Los trucos de 'phishing' que más hay que temer
1. Si usted recibe un correo electrónico que le pide "urgentemente" confirmar sus datos confidenciales, pues de lo contrario su cuenta bancaria será cerrada, empiece por dudar de la veracidad de esta petición.2. Muchas veces recurren al truco de enviar un SMS pidiendo detalles para confirmar si es usted de verdad un cliente del banco. Aunque los bancos tienen un servicio de mensajes de texto para confirmar, por ejemplo, una transacción hecha por internet, nunca solicitarán contraseñas ni información personal a través de ese medio.
3. Otra práctica muy engañosa consiste en recibir un correo electrónico o un mensaje de texto al teléfono, donde se le solicita confirmar algunos datos para activar algunos servicios de los que usted todavía no dispone.
4. En algunas ocasiones los maleantes, haciéndose pasar por su banco, le envían un mensaje al teléfono donde le ofrecen un enlace para descargar una nueva aplicación que, supuestamente, le permitirá gestionar mejor su cuenta bancaria. La compañía de seguridad informática ESET recuerda que el troyano bancario Hesperbot, que descubrieron recientemente, usa un sitio falso para que los usuarios ingresen su número de teléfono e instalen una aplicación maliciosa que traspasa los sistemas de seguridad.
5. Otro método de estafa parte del envio de un e-mail donde se comunica que es necesario cambiar la tarjeta bancaria debido a supuestos "defectos" de la misma y que enviarán a una persona a recogerla que además le pedirá el número de PIN como confirmación.
6. Según ESET, una de las nuevas formas de engaño consiste en llamar al teléfono fijo de la víctima para avisarle que se han detectado transacciones fraudulentas en la cuenta. Para ganarse su confianza pide que llame al número oficial del banco, pero lo que realmente ocurre es que reproducen un sonido de marcado y la víctima nunca se comunica con el banco sino con los mismos delincuentes. Acto seguido proceden a pedir detalles de la cuenta.
Los expertos de ESET recomiendan tener un software de seguridad actualizado que garantice la protección de los datos, así como recordar que ninguna entidad bancaria le solicitará ningún tipo de datos confidenciales.
El FBI comunicó a mediados de este año que en el 2012 los delitos cibernéticos habían aumentado en un 8,3%, afectando a unas 290.000 víctimas que perdieron un total de unos 525 millones de dólares.