Sociedad
Empleada al presidente de McDonald's: "Llevo aquí 10 años y no tengo para zapatos"
"No puedo permetirme comprar zapatos para mis hijos.¿Cree usted que es justo que gane 8,25 dólares a la hora cuando he trabajado 10 años para McDonald's?", le espetó la empleada, madre soltera de dos hijos, al presidente de McDonald's, Jeff Stratton.
Nancy Salgado trabaja de cajera en el restaurante de comida rápida desde los 16 años y nunca le han subido el salario. Esa fue la razón que la llevó a dirigirse directamente al presidente de McDonald's, interrumpiendo su discurso en el Union League Club en Chicago.
"Y yo llevo cuarenta años aquí", fue la única replica de Jeff Stratton.
Salgado fue detenida y llevada a la Policía junto con otras seis personas.
"Él tiene que saber por lo que pasan todos los empleados de McDonald´s. Estamos luchando día a día para cubrir nuestras necesidades en nuestras casas, comprar cosas para nuestros niños", dijo Salgado en una entrevista al portal 'The Real News'.
A finales de septiembre miles de empleados de restaurantes de comida rápida como McDonald's, Taco Bell y Wendy's protestaron por todo el país para conseguir mejoras salariales. Los activistas pidieron un aumento de casi el doble del salario a la hora, hasta los 15 dólares, mientras que desde la Casa Blanca promueven incrementar el salario a 9 dólares. Los manifestantes reclamaron el derecho a organizar su propio comité de trabajadores sin sufrir represalias.
"Y yo llevo cuarenta años aquí", fue la única replica de Jeff Stratton.
Salgado fue detenida y llevada a la Policía junto con otras seis personas.
"Él tiene que saber por lo que pasan todos los empleados de McDonald´s. Estamos luchando día a día para cubrir nuestras necesidades en nuestras casas, comprar cosas para nuestros niños", dijo Salgado en una entrevista al portal 'The Real News'.
A finales de septiembre miles de empleados de restaurantes de comida rápida como McDonald's, Taco Bell y Wendy's protestaron por todo el país para conseguir mejoras salariales. Los activistas pidieron un aumento de casi el doble del salario a la hora, hasta los 15 dólares, mientras que desde la Casa Blanca promueven incrementar el salario a 9 dólares. Los manifestantes reclamaron el derecho a organizar su propio comité de trabajadores sin sufrir represalias.
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