A diferencia de otras impresoras 3D, que típicamente imprimen en un único material, la impresora de la compañía Natural Machine utiliza seis cápsulas, lo que permite hacer comidas mucho más complejas. Además, tiene integrado un calentador para conservar los alimentos calientes durante el proceso de impresión, informa el diario 'The Wall Street Journal'.
"Esta tecnología consiste en un glaseado. Además de hacer cosas como pasta, esta impresora también decora tartas o añade complicados diseños a los alimentos", indicaron representantes de la empresa barcelonesa.
"Me gusta cocinar en casa, pero no tengo tiempo de preparar una masa de pasta o de pan. Pero quiero hacer comida fresca. Imprimir una fina masa y un relleno no es un problema", afirma Lynette Kucsma, una de las impulsoras de esta iniciativa.
La impresora estará conectada a Internet para que Natural Machines pueda utilizar todo el abanico de herramientas sociales para crear una comunidad de usuarios, y la máquina también podrá tuitear lo que acaba de cocinar, o subirlo a Facebook.
Pese a que la impresora, que costará unos 1.000 euros (alrededor de 1.346 dólares), es bastante lenta, "es más rápida que preparar un plato a mano y es más constante", agregaron sus desarrolladores.
No obstante, la compañía es consciente de que tiene que trabajar en el factor "asco". "La impresión 3D de comida no es una expresión muy seductora, por lo que habría que encontrar un verbo nuevo", señalaron.