Los partidarios de los habitantes de las cuevas se han concentrado cerca de la ermita de San Miguel Alto para impedir el casi inminente desalojo decretado por el ayuntamiento de Granada hace días para reordenar y ajardinar la zona, según la cadena SER.
El grupo de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Granada denuncia que detrás del desalojo de las cuevas de San Miguel por parte del gobierno municipal "se esconde una operación especulativa".
Tanto la oposición municipal como varios grupos sociales se oponen a las autoridades locales por no tener en cuenta los derechos de los habitantes de las cuevas, algunos de los cuales incluso están censados en ellas. Según los habitantes de las cuevas, los derechos de propiedad de las mismas siguen siendo objeto de estudio en los tribunales.
Por su parte, el ayuntamiento de Granada quiere acabar con el más de medio centenar de cuevas de la zona a las que califica de "infravivienda sin luz, agua, ni seguridad". Este jueves quiere empezar con el desmantelamiento de las primeras ocho de ellas.
El alcalde no descarta emplear la fuerza si los inquilinos se niegan a abandonar las cuevas.
La abogada penalista Liliana Pineda opina al respecto que el gobierno local antepone aspectos mercantiles a la vida de las personas.
"Estoy de acuerdo con lo que dicen los activistas en el sentido de que se está poniendo por encima de la vida de las personas, de su hábitat, de sus necesidades más esenciales, como la vivienda, aspectos que son puramente mercantiles. Y lo peor de todo es que ello se está haciendo sin ninguna indemnización ni reparación contra estas personas", señaló.
La abogada recordó que no es el primer caso de desalojo en aras de un beneficio económico a través del turismo.
"Porque sí se puede en determinados momentos aplicar políticas que favorezcan al turismo, pero no a costa de la vida de las personas. Y en muchas ocasiones anteriores se ha desalojado a personas de hábitat y de lugares en donde las autoridades consideraban que no debían estar, y eso resulta un atentado contra los derechos fundamentales", recordó.
El politólogo Carlos Martínez García también ofreció su opinión a RT. "Estas cuevas ya hace muchos años que están habitadas por población humilde y por gitanos, en su momento, […] y en este momento están habitadas fundamentalmente por artistas, por artesanos y también por algunas familias humildes. Es un modus vivendi tradicional, lógicamente ahora en retroceso, pero el temor que hay es que lo que se esconde detrás de la intención de desalojarlos es que el ayuntamiento de Granada quiere llevar a cabo una operación especulativa", señaló.
"Resulta que Granada es una de las ciudades más hermosas del sur de Europa y el lugar donde están las cuevas, el Cerro de San Miguel, es un entorno paradisiaco, es decir, es una maravilla. Se trata de arrojar a la población humilde que vive en la zona, como artesanos y algunos estudiantes, con objetivos puramente especulativos", explicó García.