Paul Craig Cobb, un neonazi de 62 años que vive en Leith, el año pasado intervino con la idea de convertir el pueblo en el que vive en Dakota del Norte en un bastión de los partidarios de la supremacía blanca. Su sueño fue atraer a racistas para que algún día controlen ese estado y, en última instancia, el país.
Hace poco se informó que Cobb ahora vive a unos 220 kilómetros de la ciudad después de ser declarado culpable de los cargos de delito menor relacionado con sus esfuerzos racistas.
Según informa la agencia AP, uno de los conocidos de Cobb que comparte sus ideas rasistas, Tom Metzger, dice que ahora está pensando en "la construcción de un monumento a la raza blanca".
Jeff Schoep, otro aliado de Cobb, a su vez, ofrece establecer un edificio para los miembros del Movimiento Nacional Socialista, añade AP.