1. Fumadores
Parece que fumar no solo deteriora nuestra salud física, sino también la mental. Investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington comprobaron cómo un aumento de los impuestos sobre los cigarrillos coincidió con una caída en las tasas de suicidio. Utilizando los datos del Centro Nacional de Estadísticas de Salud, el equipo de investigación descubrió que cada aumento de un dólar en los impuestos del tabaco disminuye en un 10% el riesgo de suicidio."Realmente tenemos que estudiar más los efectos del tabaco y de la nicotina, no solo en la salud física, sino en la salud mental también", sostiene el investigador principal del estudio, Richard A. Grucza. "Al igual que cualquier otra droga adictiva, la gente comienza a consumir nicotina para sentirse bien, pero, con el tiempo, comienzan a sentirse normal y, al igual que ocurre con otras drogas, el consumo continuado puede conllevar depresión o ansiedad, lo que explicaría esta relación con los suicidios", explica.
2. Adolescentes con conmoción cerebral
Sufrir una lesión cerebral traumática (TBI) puede dañar la salud neurológica de un adolescente en proceso de crecimiento, pudiendo provocar también un estado psicológico y emocional debilitado. Un estudio llevado a cabo en el Hospital St. Michael en Ontario reveló que los adolescentes con una lesión cerebral traumática, como una conmoción cerebral, corren mayor riesgo de muerte prematura, sobre todo debido al suicidio.Los adolescentes que sufrieron una conmoción cerebral eran tres veces más propensos a intentar suicidarse, dos veces más propensos a ser intimidados en la escuela y tenían más probabilidades de llamar a una línea de ayuda o a consumir medicamentos para tratar la ansiedad o depresión en comparación con aquellos que no han sufrido una conmoción.
3. Músicos
Las circustancias vitales de Kurt Cobain, con historial de abuso de drogas y antecedentes familiares de suicidio, fueron considerados como claros factores agravantes que influyeron en su suicidio. Sin embargo, no muchos expertos en psicología sugirieron que su carrera de músico también pudo tener algo que ver.Steve Sack, director del Centro de Investigación del Suicidio y profesor de la Universidad Estatal de Wayne, explica que las tasas de suicidio entre los músicos son tres veces más altas en comparación con los que no se dedican a la música. Mientras muchos estudios sobre el suicidio coinciden en señalar que escritores, actores y pintores son propensos a la depresión y a los pensamientos suicidas, los músicos tienden a pasar desapercibidos, aunque su trabajo es de naturaleza similar.
4. Adultos con síndrome de Asperger
El síndrome de Asperger es una condición que repercute en la sociabilidad y que causa que las personas sufran dificultades de comunicación y comportamientos restrictivos o repetitivos. Un reciente estudio llevado a cabo por el Centro de Investigación sobre el Autismo de la Universidad de Cambridge y la clínica CLASS en Cambridgeshire reveló que las personas con Asperger son nueve veces más propensas a tener pensamientos suicidas y muchos incluso intentan suicidarse en algún momento de su vida."Los adultos con síndrome de Asperger a menudo sufren una depresión secundaria debido al aislamiento social, la soledad, la exclusión social, la falta de servicios comunitarios, el bajo rendimiento y el desempleo", explica el autor del estudio Simon Baron-Cohen.
5. Adolescentes adoptados
Los adolescentes que son adoptados pueden verse más tentados a suicidarse que aquellos criados por padres biológicos, según sugiere un nuevo estudio llevado a cabo en Minnesota. Los investigadores llegaron a la conclusión de que los adoptados tenían cuatro veces más probabilidades de intentar suicidarse. Más del 8% de las chicas adoptadas y el 5% de los chicos intentaron quitarse la vida, en comparación con menos del 2% de los niños no adoptados."La adolescencia, en general, es un periodo de mayor riesgo [de intento de suicidio]", señala Víctor Fornari, director de psiquiatría infantil y adolescente en el Sistema de Salud North Shore-LIJ en New Hyde Park, Nueva York."Y ahora hay evidencias de que el riesgo puede ser relativamente más alto para los adolescentes adoptados", agregó.