Una cuarta parte de los estadounidenses quiere que su estado se separe de EE.UU.

El referéndum escocés alentó las esperanzas secesionistas de algunos ciudadanos de EE.UU., donde casi una cuarta parte de la población es partidaria de que su estado se independice, según una encuesta realizada por Reuters.
El 23,9 por ciento de los estadounidenses encuestados entre el 23 de agosto y el 16 de septiembre dijeron apoyar firmemente la idea de que su estado se separe de EE.UU., mientras que el 53,3 por ciento de los 8.952 encuestados se opone la idea de la independencia, informa Reuters.

El presidente del movimiento separatista tejano Texas National Movement, Daniel Miller, dijo a RT que los tejanos están descontentos por el hecho de que los políticos de Washington ignoran las cuestiones más importantes para su estado.
No creo que haya una gran diferencia entre que gobierne un partido u otro. No hacen nada

"Uno de las grandes problemas en Texas ahora mismo es, obviamente, la frontera y la inmigración", dijo Miller. "Durante los últimos ocho años, los temas relacionados con la frontera y la inmigración han aparecido constantemente en las encuestas como la preocupación número uno para los texanos; sin embargo, el Gobierno Federal sigue sin tomar medidas sustanciales para resolver la crisis fronteriza o los problemas de inmigración", declaró.
 
"Cuando usted tiene problemas de agua o fronterizos, de inmigración, es muy difícil aceptar que los hombres y las mujeres que trabajan duro aquí, en Texas, envíen su dinero para impuestos a Washington DC para que sean desperdiciados", subrayó Miller.
 
"No creo que haya una gran diferencia entre que gobierne un partido u otro", secunda Roy Gustafson, un habitante del estado de Carolina del Sur que vive de la pensión por incapacidad. "No hacen nada", dijo. "Sería mejor para el estado [Carolina del Sur] si administráramos las cosas nosotros mismos", concluyó.
 
Muchos estadounidenses se muestran a favor de independizarse de EE.UU, pero creen que algo así nunca sucederá. Sin embargo, una encuesta realizada por Reuters mostró que esta cuestión ignorada por Washington volvió a se actualizó bajo la influencia del referéndum llevado a cabo en Escocia.