"Me dijeron que tengo el ébola y que debo bajar del autobús", ha contado Fataomata Sompare, una mujer de Guinea de 26 años, que vive en Italia desde hace 4.
El incidente se produjo cuando un grupo de adolescentes vieron a Sompare y empezaron a gritar, mientras que algunos parientes de estos empezaron a golpear a la mujer. En una parada otros pasajeros pudieron ayudar a la joven.
"Ha sido víctima del racismo, que ahora es rampante en esta ciudad", dijo al diario italiano 'Il Messaggero' el novio de Sompare, Alessandro Corbelli, quien subrayó que el incidente fue "vergonzoso" y que la mujer fue atacada solo "porque es negra".
La histeria por el brote de ébola ha provocado un aumento de la discriminación de la gente de África. Esta semana una mujer de origen liberiano lanzó la campaña 'Soy de Liberia. No soy un virus' en las redes contra la discriminación de los africanos por el ébola después de que a su hija le 'diagnosticaran' ébola en la escuela solo por ser de Liberia.
Este miércoles la Organización Mundial de Salud informó de que el número de infectados con el virus de Ébola asciende a 9.936 casos, de los que 4.877 han resultado mortales.