Sociedad
Una joven disputará este domingo su último partido oficial de baloncesto antes de morir
Una joven jugadora de baloncesto de 19 años de edad, a quien le quedan escasas semanas de vida hará realidad su sueño, su gran pasión: disputar un partido oficial de la Liga universitaria estadounidense (NCAA).
En noviembre del año pasado, Lauren Hill fue diagnosticada con un cáncer cerebral terminal y los médicos le explicaron que le quedaban como máximo dos años de vida, informa Associated Press.
La terrible noticia llegó cuando Lauren acababa de cumplir los 18 años de edad y poco después de que fuera fichada por la Universidad Mount Saint Joseph de Cincinnati para disputar la Liga universitaria estadounidense de baloncesto.
"Días antes ya intuía algo malo. Me notaba mareada, no tenía fuerzas para lanzar el balón, no coordinaba. Pero creía que solo era el cansancio de pretemporada", explicaba Hill.
"El diagnóstico fue demoledor para mi familia, pero yo decidí no perder ni un segundo pensando que tenía una enfermedad terminal. Nunca me di por vencida. Nunca pensé ni un segundo sentarme y no vivir más, debía aprovechar el tiempo que tenía", agregó.
Y así lo ha hecho, se ha pasado los últimos meses aprovechando cada segundo como si fuera el último, viviendo al máximo, aferrada a una vida que se le apaga.
El último análisis médico, sin embargo, determinó que el cáncer avanza y que no llegaría a diciembre.
"Un partido, solo quiero jugar un partido universitario", le dijo la joven a su entrenador, y este sueño se cumplirá este domingo. El torneo empieza el próximo 15 de noviembre, no obstante, sus organizadores han decidido adelantar el calendario para hacer realidad el último deseo de Lauren.
Hill lucirá el número 22 en el encuentro que su equipo disputará ante el Hiram College en un coliseo preparado para la ocasión con más de 10.000 espectadores.
Lauren acepta con resignación y un espectacular optimismo vital su situación. "No quiero que la gente sienta lástima por mí, no me da miedo morir, solo me preocupa la gente que dejaré atrás", dijo la joven deportista.
La terrible noticia llegó cuando Lauren acababa de cumplir los 18 años de edad y poco después de que fuera fichada por la Universidad Mount Saint Joseph de Cincinnati para disputar la Liga universitaria estadounidense de baloncesto.
"Días antes ya intuía algo malo. Me notaba mareada, no tenía fuerzas para lanzar el balón, no coordinaba. Pero creía que solo era el cansancio de pretemporada", explicaba Hill.
No me da miedo morir, solo me preocupa la gente que dejaré atrás
"El diagnóstico fue demoledor para mi familia, pero yo decidí no perder ni un segundo pensando que tenía una enfermedad terminal. Nunca me di por vencida. Nunca pensé ni un segundo sentarme y no vivir más, debía aprovechar el tiempo que tenía", agregó.
Y así lo ha hecho, se ha pasado los últimos meses aprovechando cada segundo como si fuera el último, viviendo al máximo, aferrada a una vida que se le apaga.
El último análisis médico, sin embargo, determinó que el cáncer avanza y que no llegaría a diciembre.
"Un partido, solo quiero jugar un partido universitario", le dijo la joven a su entrenador, y este sueño se cumplirá este domingo. El torneo empieza el próximo 15 de noviembre, no obstante, sus organizadores han decidido adelantar el calendario para hacer realidad el último deseo de Lauren.
Hill lucirá el número 22 en el encuentro que su equipo disputará ante el Hiram College en un coliseo preparado para la ocasión con más de 10.000 espectadores.
Lauren acepta con resignación y un espectacular optimismo vital su situación. "No quiero que la gente sienta lástima por mí, no me da miedo morir, solo me preocupa la gente que dejaré atrás", dijo la joven deportista.
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