"Es una locura, es realmente una locura", dijo Nuggehalli Jayasimha, director de la Sociedad Humanitaria Internacional de la India, que esta semana se ha desplazado al templo.
"No hay caminos, no hay infraestructura, ni un solo autobús público; no hay higiene ni agua potable. Hay heces humanas en todas partes. Ha llegado un gran número de personas y todas traen un animal para sacrificar".
El mes pasado, el Tribunal Supremo de la India ordenó al Gobierno garantizar que ningún búfalo sea exportado a Nepal sin un permiso.
Posteriormente, el Ministerio del Interior indio mandó una patrulla de la guardia fronteriza para asegurar que "se detenga el movimiento de ganado para el sacrificio durante el festival de Gadhimai Mela".
Se informa que hasta el momento más de 2.000 animales han sido incautados en varios puntos de la frontera entre India y Nepal y que 100 personas fueron detenidas.