De acuerdo con el testigo del incidente, los agentes trataron de obligarlo a borrar el vídeo de su teléfono móvil. Durante dos días, esta grabación difundida en el perfil de Puleo Santiago fue vista más de 2,5 millones de veces.
Según Esteban Flores, un representante de la Policía de Mesa citado por los medios locales, los agentes acudieron al lugar de los hechos después de que la madre de la adolescente llamara a la comisaría pidiendo que recuperaran a su hija, que padece un trastorno mental, después de que la chica se escapara del coche.