Cruceros abandonan la Reviera mexicana por disminución en la demanda
El lujoso crucero Mariner of the Seas, de la empresa naviera Royal Caribbean Cruises Ltd., partirá este domingo en su última travesía desde el puerto de Los Ángeles a la Reviera mexicana. Esta es la primera de las tres líneas que abandonarán la costa occidental de México a lo largo de 2011 por la causa de disminución en la demanda.
Después de que el 8 de enero 14 cuerpos decapitados fueran hallados en el propio centro vacacional de Acapulco, acompañados de unos mensajes firmados por el cabecilla del clan de Sinaloa, se reveló que un día la violencia desenfrenada llegaría asimismo en los puertos incluidos en la ruta de los cruceros así en la costa Pacífica, como en el Caribe del país. Y también se puso en claro que los turistas evitarán ser rehenes de la guerra del Gobierno contra los cárteles del crimen organizado y de ellos mismos contra la buena fama de México como un centro de atracción.
Con un obvio empeño de no ofender al mandato de Felipe Calderón la directora de relaciones públicas de Norwegian Cruise, Line AnneMarie Mathews, se refirió en su reciente comunicado a una “sobrecapacidad en el mercado” y cierta “disminución en la demanda” al anunciar la decisión de cerrar la ruta de desde Los Ángeles a Cabo San Lucas, Mazatlán, Puerto Vallarta y de vuelta. El crucero más económico de esta dirección, el Norwegian Star, será trasladado a un puerto de Florida luego de que realice su último viaje de seis días a partir del próximo 30 de abril. Realizará en lo sucesivo solo los viajes a las islas del mar Caribe.
Mathews afirmó que esperaba regresar en algún momento en el futuro a las rutas que enlacen a los turistas de California con las playas de la Reviera mexicana, aludiendo de esta manera a las causas verdaderas de la decisión adoptada.
Carnival Corporation también avisó esta semana que reubicaría su buque Carnival Spirit desde el puerto de San Diego a Australia a partir de 2012. No hace tiempo, en vísperas de la Noche Vieja el portavoz de esa compañía naviera, Javier Gallardo Guzmán había asegurado que Los Cabos seguiría siendo una de las rutas preferidas por sus líneas debido al renombre que el destino ha adquirido durante las dos décadas anteriores. Evidentemente las recientes noticias tristes publicadas de Cancún y Acapulco terminaron con la demanda turística y el 'renombre' tendió a cambiar.
La mencionada Royal Caribbean aun desde hace más de un año dejó de pasar por el puerto Ensenada de Baja California por razones de inseguridad y ahora va a extender esta postura a todas las costas mexicanas, pese a que Puerto Vallarta y Cabo San Lucas, los destinos más visitados por los pasajeros de los cruceros, hayan evitado parte de la peor violencia de los cárteles de las drogas.
Antes de la llegada al poder del actual gobernante y en los primeros años con Felipe Calderón como presidente las ganancias sumarias anuales de la bolsa mexicana y los presupuestos de las ciudades portuarias, por un barco de crucero solían alcanzar a 2 millones de dólares. Tras el desencadenamiento de la guerra declarada con los clanes del narcotráfico se multiplicaron los gastos de seguridad, especialmente en estos centros de atracción turística. No obstante, la ola de violencia empezó a afectar, en el sangriento año 2010, a ellos también.
En su totalidad, las batallas impuestas por el crimen organizado se cobraron la cosecha de 34.600 vidas humanas en los cuatro últimos años, de tal modo que las 15.273 víctimas cayeron en el pasado 2010, marcando el récord de pérdidas por el crimen organizado.