Un mensaje de cuatro páginas, escrito a máquina en 1919 y firmado por el propio Adolfo Hitler y en el que este expuso sus planes de persecución de los judíos, fue presentado el pasado martes por el centro Simón Wiesenthal en Nueva York.
Según se cree, estas amarillentas páginas, conocidas como la carta Gemlich, es el primer escrito de la hostilidad obsesiva de Hitler contra los judíos.
El documento, cuyo texto desde hace tiempo es bien conocido por los interesados, fue redactado por el futuro dictador y veterano de la Primera Guerra Mundial por sugerencia del capitán Ulrich Mayr, quien la presentó al capitán Gemlich, entonces a cargo del departamento de propaganda del Ejército alemán.
Al momento de escribir la carta Hitler rendía servicio en el Ejército y sus jefes estaban al tanto de su propaganda de ideas antisemitas entre los demás veteranos de la Primera Guerra Mundial. Sin embargo, el mando del Ejército buscaba “responsables” por la derrota de Alemania en aquella Guerra.
La autenticidad de la carta de Gemlich fue certificada en 1988 por el experto en caligrafía Charles Hamilton, que reveló que los Diarios de Hitler eran falsificados.
El documento fue adquirido el pasado mes por 150.000 dólares por el rabino Marvin Hier, fundador y director del Centro Wiesenthal.
En julio, el centro Shimon Wiesenthal planea exponer la carta al público en su Museo de la Tolerancia, en Los Ángeles.
"El peligro que representa el judaísmo para nuestro pueblo se expresa en la innegable aversión de grandes secciones de nuestro pueblo", escribió Hitler. "La causa de esta aversión... surge principalmente del contacto personal y de la impresión personal que dejan los judíos como individuos, que casi siempre es desfavorable".
En otra sección Hitler dijo que un gobierno podría manejar la "amenaza judía" al negar sus derechos, pero que "su meta final debe ser la remoción inquebrantable de todos los judíos".
El Centro Shimon Wiesenthal en Los Ángeles adquirió lo que se cree que puede ser la versión verdadera de la carta Gemlich. En julio, el centro planea exponerla al público por primera vez, en su Museo de la Tolerancia, posicionándola como la pieza central de su exhibición del Holocausto.
La carta fue comprada a través de un corredor de antigüedades en California. Antes, la misiva había pertenecido a un corredor en Kansas que la adquirió del soldado estadounidense William F. Ziegler.
Se considera que Ziegler encontró las cuatro páginas escritas a máquina en un archivo nazi cerca de Nuremberg, Alemania, en los últimos meses de la Segunda Guerra Mundial.
La versión de la carta más conocida por los investigadores se encuentra en el Archivo Estatal Bavariano en Múnich, y las noticias de que haya otra copia fueron encontradas con cierto escepticismo entre los historiadores puesto que el mercado de recuerdos de Hitler (al igual que de varias otras personalidades históricas) tiene muchas falsificaciones.