Dilma Rousseff es la tercera mujer más poderosa del mundo, según 'Forbes'

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, es la mujer latinoamericana más poderosa, según el reciente 'ranking' publicado por la revista 'Forbes'. Desde el puesto 95 de la lista mundial, que ocupaba en 2010, los expertos la elevaron al tercer lugar del 'podio' de las mujeres con más poder en el mundo, que está liderado por Angela Merkel y seguido por Hillary Clinton.

'Forbes' vincula el ascenso en la lista tanto a su elección como líder de la economía más grande de América Latina, como por su batalla contra un “congreso nacional rebelde que amenaza frenar su agenda y el auge económico de Brasil”. Se advierte asimismo que el fenómeno de Rousseff se extiende a las redes sociales, donde goza de apoyo de centenas de miles de seguidores.

La segunda de la región es Cristina Fernández, la mandataria argentina. Ha escalado posiciones desde el lugar número 68 en el 'ranking' mundial del 2010 hasta el 17 de este año. La publicación recuerda que Fernández, siendo la primera mujer en ocupar el despacho presidencial en la Casa Rosada, ya comenzó su lucha por un segundo mandato.

Los expertos incluyeron en la lista también a otra brasileña, Gisele Bündchen, por ser una de las modelos mejor pagadas del mundo y por su participación activa en proyectos medioambientales. Colocándose en el puesto número 60, resulta siendo la tercera mujer más poderosa de Latinoamérica.

Cierta  desilusión acerca del poderío de la primera dama estadounidense, Michelle Obama —número uno en el sondeo de 2010—, propició su descenso hasta la octava posición en el ámbito mundial. Eso permitió a la canciller de Alemania, Angela Merkel, recuperar el liderazgo absoluto que había mantenido durante cuatro años.

En total en el 'ranking' hay 8 jefas de Estado y de gobierno y 29 dirigentes de empresas grandes o multinacionales. Según destaca la redacción, la edad media de las más poderosas es de 54 años, 22 de ellas están solteras, mientras el monto del capital que está bajo su control alcanza a unos 30 billones de dólares.