Los defensores de los intereses de las víctimas de sacerdotes pedófilos acusan a Benedicto XVI y a otros tres altos cargos del Vaticano de crímenes contra la humanidad.
Este martes el grupo Red de Supervivientes de las Víctimas de Abusos por Sacerdotes y el grupo de derechos humanos Centro para los Derechos Constitucionales han presentado la declaración formal correspondiente ante la Corte Penal Internacional (CPI) en la Haya.
El texto de la declaración condena la "estrategia de silencio" del Vaticano ante los escándalos de abusos sexuales. Se afirma que los funcionarios vaticanos aceptaron y aprobaban el generalizado encubrimiento de las violaciones y abusos contra los menores.
También se critica la política del Vaticano, contraria al uso de preservativos contra el VIH y las "amenazas" contra los católicos disidentes.
La Corte Penal Internacional todavía no ha realizado ningún comentario.