El Congreso argentino dio este martes un paso histórico hacia la despenalización y la legalización del aborto hasta las 12 semanas de gestación. El dictamen correspondiente fue aprobado por la Comisión de Legislación Penal de la Cámara de Diputados.
Ahora el proyecto necesita la aprobación de las comisiones de Salud y de Familia y luego podría ser llevado a debate en el pleno. Pero en caso de que el tema no sea debatido antes de fin de año, perderá su estado parlamentario y el proceso deberá reiniciarse.
Actualmente el aborto está prohibido en Argentina, salvo en los casos de peligro para la vida de la madre o de violación de una mujer con sus capacidades mentales disminuidas. Este tema provoca acaloradas discusiones en la sociedad del país, pero, según los últimos sondeos, la mayoría de los argentinos respalda la legalización.
La presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, se ha manifestado en contra del aborto, pero tampoco ha dado instrucciones a sus legisladores de no discutir el tema. La Iglesia Católica declaró hoy a través de un comunicado que “el aborto es un peligro contra la vida y cuando una mujer está embarazada, no hablamos de una vida sino de dos, la de la madre y la de su hijo o hija en gestación. Ambas deben ser preservadas y respetadas”.
La estadística actual de abortos en Argentina es verdaderamente terrorífica. Según estimaciones de las ONG y expertos en salud, cada año unas 500.000 mujeres recurren a un aborto ilegal en este país latinoamericano. Como consecuencia de las malas condiciones en los establecimientos que ofrecen estos servicios, entre 80 y 100 pierden la vida, en su mayoría jóvenes y pobres.