No suspenderán la sentencia de los 'padres asesinos' de EE. UU.
El tribunal de la ciudad estadounidense de York no va a suspender la sentencia a los esposos Craver, reconocidos culpables de haber asesinado sin intención a su hijo adoptivo de Rusia. El tribunal local declinó la petición de los abogados de los Craver de reiniciar el proceso aduciendo que "son totalmente inocentes".
El caso del asesinato de un menor ruso por sus padres adoptivos estadounidenses generó múltiples polémicas en la sociedad. Vania Skorobogátov, de la región de Cheliábinsk y adoptado por Michael y Nanette Craver, falleció el 24 de agosto de 2009 en un hospital estadounidense de un trauma craneoencefálico. La muerte del niño de 7 años fue el resultado de múltiples heridas y torturas.
En aquel entonces los padres adoptivos de Vania declararon que el menor se había caído y golpeado en la cabeza. Además, acusaron al pequeño de causarse lesiones a sí mismo, ya que sufría de alteraciones psíquicas.
El 18 de noviembre el tribunal de la ciudad de York condenó a los esposos a una pena de cárcel que podría oscilar entre los 16 meses y los 4 años y los siguientes 5 años de prueba. El matrimonio fue liberado en la sala del tribunal justo después de ser pronunciada la sentencia, puesto que los Craver ya habían pasado en la cárcel alrededor de 1,5 años, es decir, más tiempo del plazo mínimo de la sentencia.
Hace tres semanas los abogados de los Craver pidieron al tribunal que reinicie el proceso argumentando una supuesta desestimación de las pruebas de la inocencia de sus clientes. El juez John Kennedy se negó a suspender la sentencia y rechazó la petición de los Craver de reducir los gastos procesales, que alcanzan los 98.000 dólares.