No desconectar de las redes sociales al volante puede salir muy caro

Enviar mensajes de texto o navegar por Internet mientras se conduce es un peligro que puede costar muy caro, por lo que varios movimientos impulsan campañas para que se prohíba esta actividad al volante.

Es el caso de Clay y Shauma Sauer, una pareja del estado de Idaho, Estados Unidos, que promueven esta iniciativa tras perder a su hija en un accidente de tránsito. “No puedo hablar de esto ahora. Conducir y ‘mensajear’ simultáneamente no es seguro, jajaja”, escribió en Facebook, Taylor Sauer, segundos antes de fallecer en un accidente automovilístico por falta de concentración mientras conducía.

El pasado 14 de enero, Taylor, de 18 años, se dirigía desde la Universidad Estatal de Utah en Logan hacia Caldwell, Idaho, para visitar a sus parientes. Sin embargo, durante el trayecto escribía constantemente mensajes a través de la red social a uno de sus amigos.

Momentos después de la última actualización de su cuenta en Facebook, la joven murió luego de que su coche,  en el que iba a más de 120 kilómetros por hora, se estrellara contra un camión.

Los investigadores determinaron que Sauer no usó los frenos antes del fatal incidente, y después de comprobar los registros de su teléfono celular, descubrieron que ella enviaba mensajes cada 90 segundos mientras conducía.

Idaho es uno de los 13 estados de EE. UU. donde no está penalizado el envío de mensajes de texto mientras se está conduciendo, por lo que la familia Sauer promueve esta iniciativa para concienciar a los conductores del peligro que representa esta actividad, e ilegalizarla con el fin de evitar futuros accidentes de tráfico por esta causa.