Un total de siete meses empleó Mihu para crear esta nueva obra de arte, empleando únicamente los famosos bloques de plástico y ‘dar vida’ a la primera de las tres cánticas del memorable libro escrito a principios del siglo XIV.
“No he leído ‘La Divina Comedia’ completa, solamente leí las descripciones de los círculos del Infierno que encontré en Internet. No quise que mi trabajo esté basado en las descripciones originales de estos círculos, por eso mi objetivo era crear una visión nueva de cada uno de ellos. Le presté más importancia a los significados de los nombres de cada círculo, por eso el resultado es más producto de mi fantasía, mi imaginación", explicó
el autor.
Según el artista, su parte favorita fue el IV círculo, donde los pecadores son los avaros y los pródigos, mientras que el III círculo, donde son condenados los glotones, le pareció el más temible. Vea las nueve 'creaciones' de Mihai Marius Mihu, aquí.