Las lista de países de la región en los que está presente el problema de la explotación laboral infantil es larga: Guatemala, Honduras, El Salvador, Colombia, Ecuador, Bolivia, Brasil, Perú, Argentina, Paraguay y Uruguay. La mayoría de los menores explotados en estos Estados trabajan en el campo, en las minas o han sido introducidos en la industria del porno.
No obstante, América Latina no es la peor región del mundo en cuanto a la explotación laboral de los menores. En este sentido el continente peor posicionado es África, donde uno de cada cuatro niños se ve afectado por este problema, seguido por Asia, donde uno de cada ocho menores sufre la explotación laboral.
Además, la mayoría de los niños se ven obligados a dedicarse a labores peligrosas, señalan los estudios.
A pesar del panorama poco prometedor, el informe presenta algunos datos optimistas. Así, por ejemplo, desde el año 2000 hasta 2008, la explotación laboral de los menores se ha reducido en un 30% a nivel global.
Los especialistas de la Organización Internacional del Trabajo opinan que si todos los países del mundo respetaran los acuerdos internacionales que prohíben la incorporación al mundo laboral de los niños, este problema podría erradicarse en cuatro años.