Rafael Sansó, párroco de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Villafamés, en España, fue detenido en noviembre del 2010. En la operación policial, la Guardia Civil encontró más de 21.000 archivos de contenido pedófilo, algunos con bebés, que ocupaban unos 600 gigas en la memoria de su computadora.
Los investigadores probaron que el sacerdote compartía el material pedófilo con los usuarios de la red GROU.PS, vinculada con la pedofilia y cuyos usuarios debían recibir una invitación previa para integrarse, además de aportar nuevo material. En total, la policía identificó a 10.759 usuarios de esta red.
La fiscalía pidió inicialmente 3 años y medio de prisión para el acusado, pero después de que Sansó reconoció los hechos e inició un período de negociaciones para evitar el juicio oral, mismo que hace una semana concluyó con el acuerdo de 2 años de prisión y la privación de su derecho de sufragio pasivo (la imposibilidad para postularse como candidato) durante el tiempo de la condena.