Sociedad
Facebook, tan grato como la comida o el sexo
Publicar un comentario en las redes sociales como Facebook produce el mismo placer que el sexo o una deliciosa comida, según un estudio de la Universidad de Harvard.
De acuerdo a los científicos responsables del estudio, el acto de compartir virtualmente con otros tus sentimientos y emociones aumenta el nivel de la hormona dopamina, bien conocida por estar implicada en la motivación, el placer y el deseo.
Este efecto se relaciona con la necesidad de hablar de uno mismo, explican los expertos. Abrirse a los demás genera una sensación de recompensa y gratificación personal, señala el estudio.
Los científicos indican que los humanos dedican del 30 al 40% de sus conversaciones a hablar de sí mismos, a contar sus propias experiencias y opiniones, y casi el 80% en Facebook u otras redes sociales, por la sencilla razón de que es "intrínsecamente gratificante".
"Lo que queríamos saber es por qué, de manera constante, las personas divulgan información acerca de sí mismas en las conversaciones, por Internet, con conocidos o desconocidos, con quien quiera que les escuche", asegura Diana Tamir, la directora del estudio.
No obstante, lo de comunicarse en las redes sociales es un arma de doble filo. Según otro estudio de Universidad de Waterloo, esta actividad puede ser peligrosa para las personas con tendencias depresivas, ya que pueden caer en una prolongada depresión al sufrir rechazo en las redes sociales y, por ende, por cansar a sus amigos virtuales con sus quejas.
Este efecto se relaciona con la necesidad de hablar de uno mismo, explican los expertos. Abrirse a los demás genera una sensación de recompensa y gratificación personal, señala el estudio.
Los científicos indican que los humanos dedican del 30 al 40% de sus conversaciones a hablar de sí mismos, a contar sus propias experiencias y opiniones, y casi el 80% en Facebook u otras redes sociales, por la sencilla razón de que es "intrínsecamente gratificante".
"Lo que queríamos saber es por qué, de manera constante, las personas divulgan información acerca de sí mismas en las conversaciones, por Internet, con conocidos o desconocidos, con quien quiera que les escuche", asegura Diana Tamir, la directora del estudio.
No obstante, lo de comunicarse en las redes sociales es un arma de doble filo. Según otro estudio de Universidad de Waterloo, esta actividad puede ser peligrosa para las personas con tendencias depresivas, ya que pueden caer en una prolongada depresión al sufrir rechazo en las redes sociales y, por ende, por cansar a sus amigos virtuales con sus quejas.
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