Esta decisión se anuncia en vísperas del desfile del Orgullo Gay en la ciudad californiana de San Diego este sábado. El Pentágono dice que los organizadores del evento han instado activamente a los militares a acudir con uniforme a la marcha.
Más de 300 militares estadounidenses han manifestado su disposición a participar en el evento en San Diego, pero no se sabe cuántas personas llegarán con su uniforme.
Las reglas establecidas por el Pentágono permiten a los militares desfilar con uniforme, solo si obtienen el permiso del comando. Además, el Ministerio de Defensa subrayó que si los militares acuden al desfile gay en el uniforme, entonces deberán acatar todas las normas del Ejército de EE.UU.
Sean Sala, ex militar estadounidense y asistente al desfile del Orgullo Gay del 2011, aplaudió la decisión del Pentágono, defendió el uso de uniformes porque los soldados no sirven en el Ejército vestidos solo con camisetas. Anteriormente, los soldados de Canadá y Reino Unido era los únicos que participaban en las marchas gay con sus uniformes.
Este año, el Pentágono declaró a junio como el 'mes de las minorías sexuales'. Así, el Ministerio de Defensa ha organizado varios eventos dedicados a los militares homosexuales que sirven en el Ejército de EE.UU., como un espectáculo de fuegos artificiales. Además, el presidente Obama y el secretario de Defensa, Panetta, se dirigieron a los soldados gays y lesbianas a través de video mensajes
El año pasado fue derogada la ley 'Don't ask, don't tell' ('No preguntes, no cuentes') que permanecía en vigor desde 1993, y por la que se impedía a los soldados mostrar o hablar de sus homosexualidad a riesgo de ser expulsados. Al mismo tiempo, los comandantes no podían preguntar a los soldados sobre su orientación sexual. Mientras esta ley estuvo vigente fueron defenestrados alrededor de 14.000 militares.