El sábado, el mandatario ruso mantuvo conversaciones con Kōichirō Gemba, el ministro del Exterior japonés, acerca del fortalecimiento de las relaciones entre dos países.
Después de la ceremonia oficial, Putin le pidió al ministro que trasmita su agradecimiento a Norihisa Satake, el gobernador de la prefectura
de Akita por el regalo. El presidente prometió a enviarle un gato siberiano, nativo de la zona oriental de Rusia, dado que Satake prefiere
más a los felinos.
Según el portavoz de Putin, el cachorro llegó a Moscú el viernes pasado y ya fue trasladado a la residencia del mandatario.
El perrito Yume ('Sueño' en español), cuyo nombre fue elegido por el mismo presidente ruso, es una hembra de tres meses de la raza Akita Inu, conocida por la película 'Hachikō'.
El presidente ruso ya tiene el perro labrador Koni y el mastín búlgaro Buffy, este último regalo del primer ministro de Bulgaria, Boiko Borisov, que fue entregado durante la visita de Putin a Sofía en noviembre de 2010.