La noche del domingo los dos finalistas del la prueba, Huber Felípez y Ronald Cuéllar, por mutuo acuerdo decidieron dar por finalizado el maratón y repartirse el premio de 10 000 dólares tras haber pasado ante la gran pantalla 200 horas, 30 minutos y 50 segundos en dos salas de cine en Cochabamba y Santa Cruz respectivamente. Los dos ganadores pactaron que sus nombres figurasen en la inscripción del 'Libro de Guinness de los Récords'.
El miércoles, los auspiciadores harán la entrega de los premios.
El Segundo Maratón de Cine arrancó el 1 de septiembre simultaneamente en tres ciudades bolivianas con un saldo total de participantes de 1400 cinéfilos, que tenían solo 15 minutos de descanso entre las películas y una media hora para desayunar, almorzar y cenar. A lo largo del maratón los participantes estaban vigilados por médicos y policías antidroga, para evitar dopaje. Entre las bebidas más consumidas estaban mates de coca, café, agua y energizantes. Este año los organizadores del evento cumplieron con todos los requisitos para registrar la marca en el 'Libro Guinness de los Récords'.