Nadie podría esperar que el prisionero fuera lo suficientemente delgado y flexible como para colarse a través de un agujero de 15 centímetros
de alto y 45 de ancho. Sin embargo, lo hizo el pasado 17 de septiembre. Pasó en la libertad solo unos pocos días y fue localizado y detenido por la Policía, según los medios locales.
Las capacidades corporales del preso, apodado 'el Rey del Yoga’, le ayudaron a dedicar su vida a robos y saqueos. Fue condenado a prisión varias veces. En total, estuvo 23 años en la cárcel y aprovechó cada condena para mejorar su técnica del yoga.