El rompecabezas de 252 piezas cuesta 24,99 dólares y muestra una foto de los hornos crematorios de Dachau, al sur de Alemania. Se puede encontrar en la categoría de juguetes con una indicación que señala que está recomendado para niños “a partir de 8 años”.
La aparición del puzzle ha provocado la indignación de la legisladora alemana Gerda Hasselfeldt que considera que “para los supervivientes de campos de concentración y los allegados de las víctimas es una verdadera bofetada en la cara". Otros activistas subrayan que la venta de tal juguete hace un flaco favor a la reputación de la tienda y exigen que el puzzle sea retirado de la venta.
El campo de Dachau es uno de los numerosos campos puestos en marcha por el régimen nazi. Más de 200.000 personas fueron encarceladas en este campo y entre 32.000 y 43.000 perdieron la vida.