Especialistas de diferentes organizaciones médicas de Japón examinaron a 17.920 adolescentes de entre 13 y 18 años. Los participantes del estudio contestaron a preguntas diseñadas para descubrir síntomas de ansiedad y depresión y revelar si los jóvenes tenían inclinaciones al suicidio.
Además, los investigadores preguntaron a los participantes cuántas horas dormían y si se conectaban a Internet para entrar a las redes sociales o chequear sus correos electrónicos después de acostarse.
Los científicos encontraron que los adolescentes que utilizaban su celular después de haberse acostado resultaron más propensos a tener problemas con su salud mental y padecer depresión.
Asimismo, las ideas suicidas eran más recurrentes.
El estudio de los científicos japoneses se complementa con los resultados de una investigación de sus colegas estadounidenses del Instituto Politécnico Rensselaer de Nueva York. Ellos demostraron que la iluminación de las pantallas de los dispositivos (retroiluminación) reprime la producción de melatonina en el organismo humano. Así se cambia el ritmo del reloj biológico, que empieza a funcionar mal.
Según los investigadores japoneses, la alteración de ese ritmo en los adolescentes, cuya mentalidad se está formando, es especialmente peligroso y podría llevar a graves trastornos mentales.
El estudio fue publicado en la revista 'Journal of Pediatric Psychology'.
Recientemente, los psicólogos decidieron incluir el trastorno causado por el uso desmedido de Internet en la lista de enfermedades mentales de una enciclopedia psiquiátrica internacional. Los menores de edad corren particularmente el riesgo de contraer este trastorno.