La recogida de firmas se lleva a cabo después de que San Petersburgo y otras regiones de Rusia prohibieran la promoción de la homosexualidad. La iniciativa pretende vetar la “propaganda de la sodomía, el lesbianismo, el bisexualismo, la transexualidad y la pederastia” a los menores de edad.
La iniciativa fue emprendida por el movimiento Asamblea Popular y apoyada por miembros de otras organizaciones no gubernamentales, activistas de la Iglesia ortodoxa y otras confesiones, y también por los activistas de la Asociación de Consejos de Padres.
Los activistas apoyan la ley local aprobada por el Parlamento de San Petersburgo el pasado marzo y proponen extender esta norma legislativa a la capital de Rusia. Además, piden a la Duma de Moscú que establezca el cierre de todos los locales donde se reúnen miembros de la comunidad LGTB (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales). El líder de la Asamblea Popular, Oleg Kassin, declaró: “Ante todo es necesario cerrar los clubes de gays que tienden un lazo a las almas débiles de los adolescentes para atraerlos a la comunidad homosexual”.
Varios diputados de la Duma de Moscú (el Parlamento local) están listos a apoyar la iniciativa. Ellos insisten en que es necesario aprobar esta ley a nivel nacional.