Un 'via crucis' antes del último viaje
Dunaj dijo que ella se desvivió lo indecible por llamar a la aerolínea de antemano, que pidió una silla de ruedas y que incluso tomó precauciones adicionales para asegurarse de que tenía la documentación apropiada para sus tubos de alimentación y medicamentos con receta que llevaba consigo. Sin embargo, todos esos intentos por aliviar los controles de seguridad no facilitaron el procedimiento.
Frente al relato de la mujer, según el cual un agente rasgó una de sus cinco bolsas de solución salina y las solicitudes para ser examinadas en una instalación separada fueron ignoradas, la TSA esgrime que sus agentes actuaron según el protocolo. Dunaj decidió hacer el viaje después de que le informaran de que le quedaban entre tres o cuatro meses de vida. "Hawaii es una de las cosas más bonitas que he visto", asegura Dunai, que reconoce que este viaje encabezaba la lista de las cosas que quiere hacer antes de morir. La paciente entrará en un hospicio el próximo 17 de octubre.