Por el porcentaje de los que profesan el Islam, la comunidad autónoma ocupa el tercer sitio en Europa, después de Francia y Bélgica. Al mismo tiempo, destaca la alta concentración de los musulmanes de la corriente más radical: los salafistas. De este peligro advierte en su ensayo el analista del Instituto Gatestone, Soeren Kern.
“Una Cataluña independiente (…) surgiría como el punto cero para la Yihad salafista en el continente y llegaría a ser una de las incubadoras para el terrorismo islamista en Occidente”, advierte el investigador.
Según sus datos, la meca de radicalismo islámico es la ciudad de Tarragona. Pero también destaca el municipio de Salt, cerca de Barcelona, donde cerca de 12.000 personas, del total de 30.000 habitantes, son inmigrantes musulmanes. Entre sus próximos planes figura la construcción de una “mega-mezquita” de 1.000 metros cuadrados acompañada con minaretes: una obra que contará con apoyo financiero de Arabia Saudita.
Barcelona cuenta ya con cinco mezquitas salafistas. Badalona, Calafell, Cunit, Gerona, Lérida, Mataró, Reus, Roda de Bara, Rubí, Santa Coloma de Gramenet, Sant Boi, Torredembarra, Valls, El Vendrel y Villanueva y Geltrú se han hecho con sus comunidades islámicas, dice el experto. Todas ellas observan sus propias leyes.
Los imanes salafistas fundan sus tribunales de sharia para juzgar a los correligionarios, tanto practicantes como no practicantes, y castigar a los que no acatan las órdenes, argumenta Kern. Ellos abogan por una sociedad musulmana ‘paralela’ a la vida cotidiana de Cataluña. Y en las escuelas islámicas ya enseñan a los alumnos que las normas de la sharia están por encima del derecho civil del Estado.
Finalmente, los grupos salafistas son muy activos políticamente. Pero los independentistas de Artur Mas apenas podrían contar con sus votos. “Todos votaremos por los partidos islámicos porque no confiamos en la izquierda ni en la derecha”, avisa un predicador salafista residente en Lérida, consultado por el ensayista. “Eso nos llevará a ganar en los consejos locales y mientras acumulemos el poder en la Comunidad Autónoma, el Islam empezará a implementarse”.