Katie es hija de un oficial militar estadounidense y se llamaba Luke. La joven, ganadora de varios concursos de belleza, confiesa que nunca se había sentido varón. El mismo sentimiento, pero al revés, tenía Emerald que nació Arin y a los ocho años ya se dio cuenta de que no se sentía mujer.
Ambos se conocieron en una clínica en Tulsa, en el estado de Oklahoma, cuando se sometían a terapia hormonal. La amistad entre los jóvenes se convirtió en amor.
Kate, de18 años, se ha sometido a una operación de cambio de género. De momento Arin, que tiene 16 años, no puede someterse a una intervención similar, tiene que esperar hasta cumplir 18 años. "Nos sentimos tan seguros con nuestro nuevo género que nadie se da cuenta ahora", dijo Katie.