El incidente tuvo lugar en julio cuando la víctima, una joven de 26 años de edad, iba de compras. En una de las calles en el norte de Londres se cruzó con un grupo de niños en bicicleta. Uno de ellos se acercó a la chica, le dijo ‘hola’ y puso su mano derecha entre los muslos de ella, antes de saltar de la bicicleta.
La mujer llamó a la Policía, mientras el niño abandonó su bicicleta y echó a correr. Los agentes no tardaron en detenerle. Una vez arrestado, el chico admitió estar presente en la escena, pero negó el asalto sexual. Sin embargo, la corte consideró que cuenta con un testimonio suficiente para declararle culpable.
Según la sentencia dictada, ahora el niño tendrá que asistir a clases de educación sexual durante nueve meses, mientras que sus padres deberán ir a un curso de atención infantil de seis meses.