Antes de llegar atacar a los niños en la escuela, Min Yongjun, de 36 años, irrumpió en una casa cercana donde también hirió a una anciana. Todas las víctimas fueron hospitalizadas, aunque las lesiones no son graves y sus vidas están fuera de peligro.
Según familiares y conocidos, el hombre, que fue detenido en el lugar de los hechos, sufre trastornos neurológicos.
No es la primera vez que menores chinos son atacados con arma blanca. En 2011, una ola de agresiones a niños en escuelas y guarderías chinas causó una veintena de muertos y 80 heridos, la mayoría de ellos menores de edad, lo que abrió un debate en el gigante asiático sobre la seguridad en los centros educativos y las causas de las agresiones.
Los rumores que fechan para este 21 de diciembre el ‘día del juicio final’ circulan activamente en China. No en vano, la policía ha detenido a cuatro personas acusadas de propagar estos rumores, mientras las autoridades chinas intentan tranquilizar a la población y aseguran que el 21 de diciembre no se acabará el mundo. Además, la Policía ha emitido un comunicado en el que pide a los ciudadanos que cumplan con la ley y se abstengan de difundir este tipo de leyendas.