Algunos de los pollos agonizaban cuando los arqueros aficionados no lograban matarlos a la primera. Los organizadores esgrimen que el juego fue "muy popular" y que la gente "disfrutó".
Además del tiro con arco, los participantes hacen uso de ballestas para intentar matar a las aves.
"Tenemos la intención de hacerlo de nuevo el próximo año. Además, los pollos no se desperdician, ya que se comen después. Las aves son los animales de granja y habrían muerto de todos modos. ¿Qué más da si es por una flecha o un hacha?", se defienden los organizadores.
"Esto es algo enfermizo. Los pollos se matan y se comen normalmente, pero de una manera humana. Una sociedad civilizada no debe matar a los animales sólo por diversión", se lamenta un padre de familia que asistió con sus hijos al evento al que prometió no volver.