Los hechos sucedieron el pasado miércoles. Burnat, director de un documental nominado a un Oscar, fue retenido junto a su esposa y su hijo de 8 años durante 90 minutos por el personal de inmigración del aeropuerto de Los Ángeles.
"Los empleados del Servicio de Inmigración de EE.UU. me detuvieron y comenzaron a hacerme preguntas”, contó a RT.
“Les dije que vine aquí a [la ceremonia de entrega de] los Oscar, que era uno de los nominados. Les resultó difícil creer que los palestinos podían ser nominados a un Oscar. Les mostré todos los documentos necesarios: visado, reserva de hotel y billetes de avión. Traté de enseñarles mi correspondencia por correo electrónico con la Academia de las Artes Cinematográficas y la invitación”, señaló Burnat.
Sin embargo, los agentes no le hicieron caso. Según explicó el director, únicamente repetían: "Si no nos proporcionan pruebas de su estancia legal en el país, les enviaremos de vuelta".
Les resultó difícil creer que los palestinos podían ser nominados a un Oscar"
Recalcó que quienes cuentan con un pasaporte palestino a menudo se ven envueltos en este tipo de situaciones. Además, aseguró que sufrió incidentes similares en países europeos. “Así no se puede continuar”, lamentó recordando lo sucedido, “también somos seres humanos”.
Burnat logró enviar un mensaje de texto al también director de cine documental Michael Moore, quien medió para que le permitieran entrar en EE.UU.
‘Cinco cámaras rotas’, codirigido por el israelí Guy Davidi, es el primer documental palestino que obtiene una nominación al Oscar. Recoge imágenes filmadas mediante cinco cámaras por el propio Burnat en su aldea ocupada en Cisjordania. Las cinco cámaras a las que hace referencia el título son las que le rompieron los israelíes durante el rodaje.