Se comen el camello que el Gobierno de Mali regaló a François Hollande

Un paro creciente, dificultades con las reformas económicas y un escándalo de blanqueo de dinero son algunos de los problemas que le amargan la vida al presidente francés, François Hollande. Por si eso fuera poco, encima se le comieron el camello.
El Gobierno maliense regaló el animal al mandatario galo el pasado 2 de febrero, cuando Hollande estaba de visita en la ciudad de Tombuctú. Fue un gesto destinado a agradecerle la intervención militar francesa contra los yihadistas. Desde entonces, el camello se encontraba en Mali bajo un cuidado especial. Según el semanario francés 'Valeurs actuelles', el propio ministro de Defensa de Francia, Jean-Yves Le Drian, era el encargado de darle a Hollande noticias sobre el animal en cada consejo de ministros.



El mismo semanario filtra que hace unos días el animal perdió la vida: la familia que lo cuidaba se lo comió. La agencia de noticias Reuters, a su vez, cita a un oficial maliense anónimo que asegura que las autoridades compensarán al presidente francés por la pérdida. "Estamos avergonzados por lo sucedido. Era un regalo que no merecía acabar así (…). En cuanto nos enteramos, sustituimos rápidamente [el camello] por uno más grande y más hermoso", insiste el oficial. Para garantizar que lo ocurrido no se repita, el nuevo regalo no se quedará en Mali, sino que será enviado a París.