Chanthima Petchthanorm, de 44 años, trabajaba como oficial en el departamento financiero de la Policía Real de Tailandia, responsable del pago de pensiones.
Entre octubre de 1994 y junio de 1998 falsificó firmas en 372 ocasiones, estafando 394.639 bahts tailandeses (más de 13.000 dólares).
Chanthima fue condenada a cinco años de prisión por cada delito.
Sin embargo, la condena fue después reducida a 50 años de cárcel, la pena máxima que permiten actualmente las leyes del país. También se le ordenó restituir el dinero a las víctimas.