Las azafatas se sentían intimidadas, porque nosotros hablábamos un idioma diferente".
"Solo dijo: 'Todos los que están sentados en esta fila tienen que levantarse y salir ahora mismo'", cuenta Sana reiterando que "fue humillante ser tratados de esa manera".
El matrimonio contó que el representante de la compañía les dijo que "las azafatas se sentían intimidadas, porque hablábamos un idioma diferente".
Algunos medios locales informan que los pasajeros en cuestión fueron avisados por el altavoz para que no hablaran en voz tan alta, pero ellos aseguran que nunca recibieron esa advertencia.
Los Bitmans recibieron un reembolso por sus billetes, pero que no pudieron acudir a su fiesta de aniversario. Ahora los afectados emprenden acciones legales contra la aerolínea.