El sacerdote siciliano Giuseppe 'Pino' Puglisi fue conocido por su lucha contra el crimen organizado y fue asesinado por la mafia en 1993. El papa Francisco le rindió este domingo homenaje como mártir. Durante su discurso dado con motivo de la beatificación, en los dos meses que lleva en el papado, es la primera vez que Francisco ha hablado del tráfico humano como de uno de los peores males que padece el mundo.
Francisco urgió a los jefes de la mafia italiana a abandonar su conducta delictiva, especialmente la explotación de personas en tareas denigrantes como la prostitución.
"Pienso en el enorme dolor sufrido por los hombres, mujeres e incluso niños explotados por tantas mafias", afirmó el papa Francisco, y criticó al crimen organizado "por obligarles a hacer trabajos que los esclavizan, como la prostitución".
"Tras esta explotación y esclavitud se encuentran las mafias. No pueden esclavizar a nuestros hermanos. Recemos para que esos mafiosos y mafiosas se conviertan a Dios", dijo el papa.