Sin darse por vencido, el viajero se dirigió luego a Australia pasando por Singapur y Vietnam. En este último país tuvo problemas de salud, pero como su visado vietnamita estaba a punto de caducar tuvo que apresurarse y caminar al menos 30 kilómetros por día.
A pesar de que el japonés ha recorrido todo el mundo tras llegar a su punto de partida, planea viajar 500 kilómetros más desde Shanghái hasta Taiwán, y desde allí regresar a su patria. Según el mismo viajero, "quiere compartir sus experiencias de viaje con los niños japoneses".