Una imagen muestra a un niño saudita pegado a la pared con cinta adhesiva

La polémica imagen, que circuló por los sitios web y redes sociales del país, ya fue calificada como "inhumana y cruel" por los defensores de los derechos humanos de Arabia Saudita. Según sus palabras, este incidente va en contra de los principios del islam. 

Maatouq al Sharif, miembro de la Comisión de Derechos Humanos del país, señaló, citado por Al Arabiya, que "lo sucedido con este niño supone una violación de sus derechos y es un delito". Asimismo, Al Sharif indicó que los ciudadanos deben ser "disuadidos" para que no vuelvan a darse situaciones parecidas, ya que "el incidente promueve la cultura de la violencia contra los niños".

Al Sharif destacó que "el niño no es capaz de defenderse" y además agregó que "este tipo de comportamientos afecta a la formación de su personalidad". 

La Comisión de Derechos Humanos de Arabia Saudita instó a los ciudadanos a colaborar con las autoridades en el proceso de búsqueda de los responsables del incidente. De acuerdo con la Comisión, los culpables deben ser castigados por violar los derechos del niño.

Al Sharif advirtió que estos actos no quedarán impunes, incluso si los responsables no eran conscientes de que cometían un delito. Los activistas también subrayaron que actualmente en el país existe la necesidad de promulgar una nueva ley para tipificar como delito casos de violencia contra mujeres y niños.