La joven pensaba que se trataba de un caso extremo de conjuntivitis, una infección o incluso un estigma, informa la cadena Canal 24 Horas. Su madre la llevó a un hospital local, donde solamente le dieron unas gotas para mitigar el ardor y aconsejaron a esperar a un oftalmólogo que visita el centro esporádicamente.
Los progenitores de Yaritza están igual de desconsolados que su hija: el padre ha pedido ayuda para que la joven pueda ver a un especialista y la madre teme perderla.
Mientras tanto, los científicos dicen que lo que padece Yaritza responde a los síntomas de la haemolacria. No es una enfermedad mortal, sino un síntoma de diferentes males. Además de conjuntivitis e infección, podría tratarse de un tumor en el aparato lagrimal o de la enfermedad de Von Willebrand tipo II, cuando la sangre no tiene una proteína esencial para el proceso de coagulación.
En la mayoría de los casos la haemolacria se manifiesta en personas jóvenes.