Las exprisioneras acusan a los tres exguardias de la cárcel -Vicente Aguilar, Jaime Smith e Israel Charles Jr.- de violaciones y humillaciones sistemáticas y exigen una indemnización por daño moral. Los mismos hombres fueron acusados en una demanda similar presentada el 20 de agosto por otras dos mujeres.
Según los jueces de instrucción, de 2007 a 2012 en una de las prisiones de la región rural texana de Life Oak los guardias "obligaron a las mujeres a practicar sexo oral y otras formas de sexo, tanto con los empleados de la institución penitenciaria como entre sí", aparte de realizar todo tipo de perversiones sexuales. Fijaban a las mujeres a la pared y las reprendían verbalmente, violándolas al mismo tiempo, según reza la demanda. Las expresas denuncian que sufrían todo tipo de maltratos, incluso las privaban de comida y agua.
Los tres guardias de la prisión han sido arrestados y ahora permanecen encarcelados.