Un museo de EE.UU. niega la entrada a una niña porque su silla de ruedas "ensuciaría"

Un museo del estado de Georgia, en EE.UU., no permitió la entrada a una niña discapacitada porque su silla de ruedas "ensuciaría la moqueta".
Lexi Hass, una niña de 11 años nacida en Carolina del Norte, padece la enfermedad de Kernicterus, un tipo de daño cerebral que causa cierto grado de parálisis cerebral y pérdida de la audición. Por culpa de esta dolencia, la pequeña ha quedado postrada en una silla de ruedas. 

La familia de la niña decidió el fin de semana pasado viajar con ella a la ciudad de Savannah, la más antigua del estado de Georgia, donde planeaban visitar el Museo Naval. Sin embargo, la visita se convirtió en una pesadilla para Lexi.

Al llegar, un empleado le dijo a la familia que la niña no podía entrar porque la silla de ruedas "ensuciaría la moqueta".

"¿Qué pasa con los zapatos? ¿Tiene quitárselos la gente?", dijo indignado el padre de la niña a la cadena WTOC mientras recordaba lo ocurrido. 

Según explicó la familia, el personal del museo le ofreció otra silla de ruedas, pero no era del tamaño adecuado ni contaba con las correas necesarias.
 
Tras lo sucedido, el museo envió una carta de disculpas a la familia Hass. Además, el empleado que le negó la entrada a la joven fue despedido.

El incidente no es un caso aislado. Después de que la noticia se difundiera en los medios locales, una mujer cuyo hijo también está en silla de ruedas aseguró haber pasado por lo mismo en aquel mismo museo. En su caso, el personal del museo le dijo a la familia del menor que las instalaciones no estaban "adaptadas para personas que se desplazan en sillas de ruedas".